sábado, 29 de enero de 2011

Libros que hay que leer - Primer aniversario

El blog Libros que hay que leer cumplió ayer, viernes 28 de enero de 2011, su primer año de vida en el ciberespacio. Para celebrarlo, la autora ha decidido organizar entre sus lectores un sorteo, cuyas bases puedes consultar en el blog. El premio consistirá en un ejemplar de A la sombra del templo, una novela de Toti Martínez de Lezea, la escritora favorita de nuestra "bloguera".

Si estás interesado en participar, puedes hacerlo desde hoy mismo y tienes de plazo hasta el próximo día 12 de febrero incluido; al día siguiente, en el mismo blog se publicará una entrada con la lista de los participantes y el número que se le ha asignado a cada uno de ellos. Para consultar más detenidamente las bases de este sorteo, puedes pulsar en el siguiente enlace al blog.

¡Suerte!

La mecánica del corazón - Mathias Malzieu

Título original: La mécanique du coeur / traducción del francés por Vicenç Tuset
Edición: 1ª ed.
Publicación: Barcelona: Mondadori, 2009
Descripción física: 173 p., 22 cm.
ISBN: 978-84-397-2195-6
Serie: Reservoir Books
CDU: 821.133.1-31"19"
Signatura: N MAL mec
Precio: 13,90 euros en la Casa del Libro



UNA HISTORIA AGRIDULCE

A todos los que hemos tenido ocasión de toparnos con este libro, seguramente lo que más nos ha llamado la atención habrá sido su portada, cuyo tema central son las figuras de los dos protagonistas (ella entre alegre y ausente y vestida de rojo, y él triste y con traje negro), los dos en una ciudad completamente gris y con varios engranajes de reloj que pueden verse detrás de ellos. Incluso la tipografía tan original que se ha utilizado para el título hace un guiño a la propia mecánica del corazón: una M con una llave de dar cuerda, como en los relojes antiguos, y una C con forma de engranaje.Me imagino que el autor debe de estar ya hasta el moño de que se lo digan, pero a mí, como al resto de personas, estos dibujos y los personajes me recuerdan muchísimo a los de las películas de Tim Burton, como Víctor y Victoria de La novia cadáver, por ejemplo; pero es que creo que si has visto casi cualquier película de Burton, es inevitable que te acuerdes de ella cuando tienes ante ti la portada de este libro. Pero es que además incluso el protagonista de esta historia se llama Jack, como el protagonista de Pesadilla antes de Navidad...

El autor de esta novela, Mathias Malzieu, era para mí un auténtico desconocido hasta que empecé a oír hablar de este libro. Además de dedicarse a la literatura, tiene también un grupo de música llamado Dionisos, cuyo último disco lleva el mismo título que la novela que nos ocupa; novela que, por cierto, va a ser llevada al cine y producida por Luc Besson (director, entre otras, de El quinto elemento o León: el profesional).

Argumento


La sinopsis que aparece en la contraportada del libro lo resume de esta manera:

Imagina la noche más fría de la historia. La nieve cae sobre la ciudad de Edimburgo. En lo alto de una colina nace el pequeño Jack, pero su corazón está

dañado
. Y por eso necesitará reemplazarlo por un reloj de madera, un corazón artificial del que dependerá su vida. Acompañemos a Jack en su aventura quijotesca desde las frías callejuelas escocesas hasta una radiante ciudad andaluza, en busca del amor. Pero ¡cuidado!, Jack debe seguir unas reglas para sobrevivir: 

Uno: no toques las agujas.
Dos: domina tu cólera.
Tres: no te enamores nunca.

Deseemos suerte a Jack, y recuerda que, como en este cuento para niños grandes, todos hemos sufrido alguna vez por nuestro voluble corazón.


La historia comienza cuando la madre de Jack, a punto de dar a luz, llega a una casa apartada en Edimburgo; allí vive Madeleine, a la que los habitantes de la ciudad tachan de bruja porque ayuda a venir al mundo a los hijos de prostitutas y madres solteras; otra de sus peculiaridades es que soluciona los problemas físicos de las personas, como en el caso de Jack, que está a punto de morir nada más nacer y al que Madeleine sustituye el corazón por un reloj de cuco. Como veis es un argumento de lo más original, aunque la novela está tan bien escrita y de una forma tan creíble que ni siquiera te llegas a plantear el hecho de que en el mundo real ninguna persona en el mundo vive con un reloj de cuco en lugar de un corazón.

Parejas que no pueden tener hijos van periódicamente a visitar a Madeleine para adoptar a alguno de los que ella aloja en su casa; pero el tiempo va transcurriendo y nadie quiere adoptar a Jack: todos se extrañan y se asustan cuando ven sus cicatrices y descubren que en su pecho hay un reloj de cuco en lugar de un corazón... Madeleine se encariña con Jack y acaba quedándose con él definitivamente; y el día que cumple diez años, lo acompaña a hacer una visita a la ciudad; allí ocurrirá algo inesperado: Jack se enamora perdidamente de una pequeña cantante, Miss Acacia, que por coquetería no quiere llevar gafas y va siempre tropezando con todo. Parece que se acaba de romper una de las reglas cruciales para la supervivencia de Jack, pues las agujas de su reloj-corazón se han vuelto medio locas...A pesar de las reticencias de su madre adoptiva, nuestro protagonista decidirá ir a la escuela con tal de poder estar cerca de Miss Acacia. Pero las cosas no saldrán como él esperaba, y no sólo no encontrará a su amada allí, sino que tendrá la "suerte" de conocer en la escuela al amor de ésta, que está desesperado porque ella ha vuelto a su Andalucía natal. Pero Jack está tan enamorado que no pierde la esperanza y decide embarcarse en un viaje, incierto y no siempre agradable, que lo llevará desde Edimburgo hasta Granada, en busca de Miss Acacia.

Personajes


Por supuesto, el principal protagonista de esta historia es Jack, el niño que nace en Edimburgo durante la noche más fría de la historia, y a cuya madre biológica no vuelve a ver jamás, después de que ella lo abandone en esa extraña "casa de la bruja". Enseguida le cogeremos cariño a este personaje, un niño sensible y permanentemente acompañado por el tic-tac de su reloj-corazón.

La supuesta bruja es Madeleine, el personaje que a partir de ahora hará las veces de madre de Jack. Madeleine no ha tenido hijos, y cuando el tiempo va pasando y se da cuenta de que nadie va a adoptar a Jack a causa de su "diferencia", se va encariñando cada día más de él.Por otro lado tenemos a Arthur, un antiguo policía al que abandonó su mujer, y que también vive en casa de Madeleine desde que ella lo acogió y reparó su columna vertebral destrozada. Además, como si fueran parte de esta familia, por la casa aparecen casi continuamente dos amigas prostitutas de Madeleine, Anna y Luna.

Otro de los protagonistas principales es el personaje de Miss Acacia, la pequeña y presumida cantante de flamenco de la que Jack se queda prendado sin remedio, por la que cruza media Europa para ir en su búsqueda, por la que está dispuesto a romper las reglas que le ha marcado Madeleine para sobrevivir, y por la que goza y sufre a causa del amor que siente por ella, y todo esto después de haberla visto una sola vez... A pesar de lo bonito que suena todo esto, hay algunos detalles de Miss Acacia que no me gustaron demasiado, y de hecho hasta llegó a caerme fatal en algún momento...A lo largo de la novela nos iremos encontrando con otros personajes secundarios, como Joe (el otro enamorado de Miss Acacia, que coincide con Jack en este amor por ella y causa de esto se ríe de él, lo acosa y lo deja en ridículo delante de los demás compañeros del colegio); nos encontraremos al mismísimo Jack el Destripador en persona; nos dejaremos llevar por el entusiasmo de Mèliés, el personaje de un mago mujeriego y obsesionado con regalar a su amada un viaje a la luna (esto es un guiño al cineasta Georges Méliès), que se hará amigo de Jack y lo acompañará en su viaje; y conoceremos al relojero Houdin, otro guiño, esta vez a un relojero que existió realmente y que inventó el cuentakilómetros, y del cual tomó su nombre artístico Houdini.

Veremos que cada uno de estos personajes simboliza una cosa: el amor de madre, el tesón, la alegría de vivir, el optimismo, la melancolía... A lo largo de la lectura de la novela iremos reconociendo estas características en cada uno de ellos.

 

La historia. Mis impresiones


Como os decía, la historia de Jack me ha parecido de lo más original y además la lectura de la novela se me ha hecho muy amena. He llegado a empatizar con todos los personajes (con unos más que con otros, por supuesto), a reír o a llorar con ellos, e incluso a sufrir con / por ellos en algún momento. La lectura es bastante rápida, básicamente porque nos pasaremos todo el tiempo deseosos de saber qué le ocurrirá a Jack a continuación, qué será de su viaje, si encontrará o no a Miss Acacia, si será capaz de controlar sus prontos para que su reloj-corazón no deje de funcionar...Después de la lectura de esta novela, creo que la impresión que me queda de ella es que se trata de toda una moraleja; y el mensaje que nos quiere transmitir es que en realidad, con nuestras virtudes y nuestros defectos, todos somos diferentes y no por ello debemos sentirnos ni más que nadie, ni por supuesto tampoco menos. Supongo (y puede que me equivoque, pero es la sensación que me ha quedado al leerlo) que en el fondo se trata de transmitirnos que los defectos físicos o de cualquier otra índole no deberían frenarnos a la hora de intentar conseguir nuestros sueños, por difíciles que éstos nos parezcan. Y otra cosa importante que también me ha transmitido es el hecho de que no debemos dejarnos vencer ni por las adversidades ni por las injusticias, sean del tipo que sean.

Eso sí, para hablar de cosas algo más mundanas, no podían faltar las dichosas erratas. La verdad es que en este libro no me he encontrado demasiadas (quien se lleva la palma hasta ahora es El laberinto de la serpiente), pero sí alguna que otra que me ha chirriado un poco... Por ejemplo el verbo "reemplazar", que en todas las ocasiones en las que aparece está puesto con una sola E; un pasaje que habla de un "epitafio gravado", que por un momento me hizo pensar en temas de hacienda; un "tú" (pronombre personal) sin tilde; o un "igual como", que yo de toda la vida pensaba que la forma correcta de decirlo era "igual que"... Soy un poco puntillosa con esto, lo reconozco; pero no lo puedo evitar y se me van los ojos a las erratas, como si de repente cobraran vida y saltaran por las páginas para que no se me escapara ni una...

 

Conclusión


Creo que la frase que mejor me encaja con esta novela es que se trata de una historia de amor muy tierna; sin embargo no es una de estas historias que más que tiernas son ñoñas, y cuando las lees parece que te vaya a dar un ataque de caries en cualquier momento... Todo lo contrario: es efectivamente una historia de amor y es efectivamente tierna, pero también tiene sus momentos agridulces o directamente tristes. También, y vuelvo a insistir de nuevo en esto, me llamó la atención el hecho de que aunque tienes claro que la historia es totalmente fantástica (eso de que alguien tenga un reloj por corazón, como mencionaba antes), está escrita de una manera que la hace totalmente creíble pero sin que pierdas la perspectiva en ningún momento.Puede que al ser dos niños los protagonistas haya quien piense que se trate de una novela dirigida también a niños; no creo que sea este el caso, aunque nunca se sabe... Pero yo diría sin dudarlo que está dirigida principalmente a adultos, sobre todo por ciertos detalles (como cuando Jack le pone nombre a su mascota) que un niño no comprendería.

En mi opinión, La mecánica del corazón es un libro totalmente recomendable: una historia original y bonita; unos personajes con los que en uno u otro momento acabarás identificándote; una prosa ligera y bien escrita; un final inesperado... Si no lo has leído aún, ya estás tardando.

miércoles, 19 de enero de 2011

Cursos - Fundación Germán Sánchez Ruipérez

Un año más, la Fundación Germán Sánchez Ruipérez lanza su programa de cursos, para bibliotecarios y documentalistas, organizados en colaboración con los Departamentos de Biblioteconomía y Documentación de la Universidad de Salamanca y la Universidad Carlos III de Madrid.

El calendario de cursos para este 2011 incluye, entre otros, los siguientes:
  • El libro electrónico y sus aplicaciones bibliotecarias
  • La lectura en las primeras edades
  • Enciende el móvil en la biblioteca
  • Indicadores de biblioteca pública
  • Cómo atender al usuario en las bibliotecas
  • Lectura y recursos para colectivos específicos: tercera edad, emigrantes y discapacitados
  • Animando a la lectura con dispositivos digitales

Los interesados pueden acceder a los cursos en la siguiente dirección.

sábado, 15 de enero de 2011

El club Dumas - Arturo Pérez-Reverte

Edición: 3ª ed.
Publicación: Barcelona: Suma de Letras, 2000
Descripción física: 559 p., 18 cm.
ISBN: 84-95501-00-7
Serie: Punto de lectura; 1/1
CDU: 821.134.2-31"19"
Signatura: N PER clu





LOS LIBROS DENTRO DEL LIBRO

Exceptuando las dos primeras entregas del capitán Alatriste y más recientemente "El húsar", hasta ahora no había leído nada más de Arturo Pérez-Reverte; hasta que el otro día en casa de mi hermana me topé con esta novela...


Argumento y personajes

Como dice textualmente la contraportada del ejemplar que he leído, descifrar el misterio de un libro que invoca al demonio, del que sólo quedan tres ejemplares en el mundo y que fue quemado en 1667 por la Inquisición junto con su impresor, se convirtió para Lucas Corso, comprador de libros antiguos por encargo, en una peligrosa aventura. Pero por si esto fuera poco, un capítulo manuscrito de "Los tres mosqueteros", de Alejandro Dumas, entra en escena y se entremezclan las historias para dar origen a un apasionamente thriller al mejor estilo de Arturo Pérez-Reverte.

La historia comienza cuando Enrique Taillefer, un coleccionista y bibliófilo, encarga a Flavio La Ponte vender el manuscrito El vino de Anjou, que supuestamente es un capítulo de Los tres mosqueteros de Alejandro Dumas. Pero como la novela ha comenzado con Taillefer misteriosamente muerto (aparentemente se ha suicidado), a la operación de venta se une el comprobar si se trata de un manuscrito auténtico. Aquí entra en acción Lucas Corso, que es todo un experto en libros y desde luego mi héroe, porque anda que no sabe (y encima seguro que ni le ha hecho falta pasar por la Escuela de Biblioteconomía).Por otra parte Varo Borja, un millonario también coleccionista de libros, le encarga a su vez a Corso que compare su ejemplar de Las nueve puertas con los otros dos ejemplares que se supone que se conservan en todo el mundo, después de que todos los demás hayan ardido en la hoguera junto con su autor por orden de la Inquisición. Las pesquisas de Corso en busca de pistas que ayuden a esclarecer estos misterios nos llevan a lugares como Madrid, Lisboa, Sintra, Toledo o París.

En cuanto a los personajes, como habréis podido adivinar el protagonista es Lucas Corso, bibliófilo hasta la médula y erudito a más no poder. Aunque nuestro cazador de libros dice muchas veces a lo largo de la novela que lo suyo es sólo trabajo, y que lo que hace lo hace por dinero, a mí personalmente me da la sensación de que disfruta estando en contacto con los libros. Pero no sólo por tenerlos cerca, sino también leyéndolos; y de hecho la novela nos ofrece continuas referencias a obras que él ha leído y cuyos pasajes en algunos casos conoce de memoria.Es un personaje un poco desaliñado, muy dado a empinar el codo (le da a la ginebra, concretamente) y algo huraño, pero tiene algo que hace que me caiga bien. Además también comprobaremos que tiene su corazoncito, como cada vez que recuerda a Nikon, una antigua amante con la que compartió momentos muy especiales.

Liana Taillefer es la viuda de nuestro bibliófilo suicida, que en un primer momento no parece ni demasiado afectada por la muerte de su marido ni tampoco demasiado interesada en su patrimonio bibliográfico, pero muy poco después veremos que las cosas no siempre son lo que parecen...Por otro lado tenemos lo que yo he denominado el grupo libresco, que incluye tanto a Enrique Taillefer (aunque ya veis que su aparición es más bien breve) como a Varo Borja (el afortunado bibliófilo que posee un ejemplar casi único en el mundo; el sueño de cualquier amante de los libros, vaya), Flavio La Ponte (amigo personal de Corso y con el cual en algunos fragmentos de la novela me he reído un montón por las contestaciones que tiene a veces), Boris Balkan (con el cual Corso se pone en contacto al seguir las pistas de la supuesta obra de Alejandro Dumas, y que le da varios consejos muy útiles para ayudarlo en sus investigaciones bibliofílicas) y la baronesa Frida Urgern (propietaria de otro ejemplar de Las nueve puertas y que personalmente me dio un poco de mal rollo porque según leía me daba la sensación de que en cualquier momento se iba a transformar en un vampiro o algo así...).

También conoceremos a una misteriosa joven que se hace llamar Irene Adler, como uno de los personajes de Conan Doyle, a la que Corso conoce en una tertulia literaria y con la que se volverá a encontrar en su viaje a Portugal. Según ella misma dice, hace su aparición para cuidar de él.Hay otros personajes que también podrían incluirse en el grupo libresco, pero quiero hacer mención de ellos aparte porque aparte de Lucas Corso, han sido los que mejor me han caído de toda la novela. Se trata, por un lado, del librero Victor Fargas, un bibliófilo portugués propietario de otro de los tres ejemplares existentes de Las nueve puertas. Por circunstancias personales se ve obligado a vender, cada cierto tiempo, algún libro de su valiosa biblioteca, y mientras leía llegué a sufrir tanto como sufre él cuando sabe que se acerca el momento en el que tiene que elegir un nuevo ejemplar para su "sacrificio". Y por otro lado, por último, tenemos a los hermanos Ceniza, impresores toledanos, cincuentones y grises como su apellido, expertos en reproducir libros antiguos y también maestros en la detección de falsificaciones. El capítulo en el que Corso va a visitarlos para que le confirmen la autenticidad de uno de los ejemplares de Las nueve puertas lo disfruté como una enana cuando empiezan a compartir con nuestro cazalibros sus teorías del tipo de papel, la encuadernación, la tipografía...

Vamos al lío


Como vemos, la historia no es complicada en un principio: por un lado, Lucas Corso debe encargarse de vender el supuesto manuscrito de Alejandro Dumas, y por otro averiguar si uno de los ejemplares de Las nueve puertas es auténtico o no. Sin embargo, la cosa se va liando y las dos historias se van entrelazando poco a poco; y no sólo llevan a Corso de un lugar a otro, sino que en más de una ocasión ponen en peligro su vida.

Además del supuesto suicido de Enrique Taillefer, otros sucesos de la misma índole harán temer a Corso que la cosa es bastante más complicada de lo que él había pensado en un principio; y eso que por su profesión está más que acostumbrado a estas complicaciones. Aunque esto en realidad queda muy novelesco, porque no conozco yo a ningún bibliófilo que haya estado a punto de morir por culpa de un libro... Es un poco como cuando hay gente que ve películas de Indiana Jones y decide que quiere dedicar su vida a la arqueología (y claro, los arqueólogos de verdad se parten de risa); en el caso de los libros, que es un mundo que tengo un poco más cercano, lo más peligroso que te puedes encontrar, cuando te mueves entre libros antiguos, por lo general suelen ser bichos y polvo, más que otra cosa...No os puedo contar nada sobre los sucesos, porque si no os destriparía el libro a los que no lo hayáis leído, y no es plan. Pero a medida que vas leyendo van pasando más y más cosas, cada vez más descabelladas y más peligrosas. Además, el autor hace continuas referencias a los mosqueteros, y veremos cómo Corso le acaba atribuyendo a cada persona, según su comportamiento y su papel en la historia, uno de los personajes correspondientes de la novela de Dumas.

Por supuesto, además de la historia en sí, en mi caso lo que más me ha gustado han sido todas las partes en las que salen a relucir aspectos bibliográficos, de historia del libro, de características de los libros (papel, tipografía, marcas de agua, tintas) según las épocas en las que fueron impresos... Ya os decía antes que uno de los capítulos que más disfruté fue el de la visita de Corso a los impresores toledanos, los hermanos Ceniza (Pedro y Pablo, como en Los Picapiedra). Si las cuestiones técnicas de los libros no te interesan ni lo más mínimo puede que te aburras, pero a mí eso de que me cuenten cómo los impresores reconocen la época de una encuadernación por el tipo de piel o por los lomos, o la imprenta de la que ha salido un libro por sus marcas externas, es algo que siempre me ha llamado mucho la atención.Otro capítulo que también me gustó, aunque quizá un poco menos porque el personaje en cuestión sufría bastante, es el que se desarrolla en Sintra, cuando Corso va a visitar a Victor Fargas y el pobre bibliófilo lo pasa fatal cuando le cuenta que su método de subsistencia es deshacerse, cada cierto tiempo, de uno de los valiosísimos libros de su enorme biblioteca. Yo que sufro cuando veo en el autobús que alguien dobla la esquina de un libro para saber dónde ha dejado la lectura, no quiero ni pensar en los malos ratos que pasaría si, como el señor Fargas, me tuviera que enfrentar a la difícil situación de tener que elegir uno de mis libros para venderlo...

Y siguiendo con cuestiones bibliófilas, también me ha gustado mucho cómo Pérez-Reverte va detallando los avances de Corso respecto a los tres ejemplares de Las nueve puertas que tiene que cotejar para comprobar su autenticidad; para alguien a quien estos temas no le llamen la atención seguramente resultará un tostón, pero a mí me encantó eso de ver los cuadros comparativos de los tres libros que va elaborando Corso:
  • de ilustraciones, con sus semejanzas o diferencias
  • de números y letras
  • de tipografías y prensas
  • de otros detalles significativos, como que en una lámina un anciano lleva una llave en la mano izquierda en uno de los ejemplares, y en el otro la lleva en la derecha.

Son de hecho cosas que nos contaban en la carrera, en la asignatura de fondos bibliográficos antiguos, y con lo que me gusta eso de fijarme hasta en los detalles más pequeños, recordar todo eso me hizo bastante tilín. Vamos, que aquí no puedo más que darle un aplauso a Pérez-Reverte porque desde luego se ha documentado perfectamente para escribir sobre esto (o es también un erudito bibliófilo y no le ha hecho falta documentarse tanto en realidad).Y si a esto le sumamos que detrás de esta trama nos encontramos con que en realidad Las nueve puertas no es ni más ni menos que todo un tratado para invocar al diablo, la emoción está servida.

Conclusión


Como ya comentaba al principio, la razón principal por la que me animé a leer este libro fue porque me topé con él en las estanterías de mi hermana; bueno, quizá fue él quien se hizo ver... Pero también tenía la idea remota de que se trataba de un libro que precisamente habla sobre otros libros, y eso para mí es toda una tentación.

He disfrutado mucho leyéndolo, y de hecho una de las cosas que me gusta de Pérez-Reverte es que tiene un manejo impecable del lenguaje y que redacta creo que estupendamente bien; me he encontrado alguna cosilla como guiones partiendo palabras por sitios por donde se supone que no deberían partirse; y algún leísmo suelto; pero normalmente suelo leer poniendo atención en las posibles erratas y quitando esas pequeñas cosas, aquí no he encontrado ninguna barbaridad.Lo que me ha dejado un poco sin palabras de esta novela ha sido su final, porque después de tenerte con la intriga durante tantas y tantas páginas, cuando por fin se resuelve la cosa te quedas (al menos en mi caso) con cara de idiota pensando: "¿Y tanto rollo para esto?". Pero como los gustos son libres, lo que a mí me ha dejado un poco chafada puede que a otra persona le parezca estupendo, así que desde luego recomiendo la lectura de este libro que tan buenos ratos me ha hecho pasar.

viernes, 14 de enero de 2011

Devoradora de libros - Primer aniversario



El blog Devoradora de Libros está de enhorabuena; hoy acaba de cumplir su primer año de vida en la blogosfera, y para celebrarlo ha organizado un sorteo entre sus lectores. El premio consistirá nada menos que en tres lotes de libros de lo más variado.

Si quieres participar, estás a tiempo desde hoy mismo y hasta la medianoche del día 14 de febrero. Para consultar las bases, pulsa en el siguiente enlace.

¡Suerte!

martes, 11 de enero de 2011

Teatro inédito de Gloria Fuertes

Leo hoy en El Mundo, con absoluta sorpresa, que esta misma semana se ha publicado un libro con nada menos que cuatro obras de teatro inéditas de mi queridísima Gloria Fuertes, mi poetisa favorita y la primera, porque fue con ella con quien descubrí la poesía a muy temprana edad... Además esta mujer me cayó mejor, si cabe, cuando me enteré de que no sólo se dedicaba a escribir, sino que también tuvo una época en la que trabajó como bibliotecaria.

La obra se titula "El caserón de la loca y otras obras de teatro", y ha sido publicada por Torremozas. Los cuatro títulos que incluye el libro, además de "El caserón de la loca", son "Vuelva mañana", "Nombre: Antonio Martínez Cruz" y "Prometeo", que obtuvo el Premio Valle Inclán de Teatro en 1952 pero que por desgracia nunca llegó a ver la luz; afortunadamente, ahora tendremos la oportunidad de disfrutar no sólo de esta obra de teatro sino de las otras tres que se incluyen en esta nueva obra que ha sido una sorpresa de lo más agradable.

jueves, 6 de enero de 2011

Asesinos sin rostro - Henning Mankell

Título original: Mördare utan ansikte / traducción del sueco por Dea Marie Mansten y Amanda Monjonell
Edición: 6ª ed.
Publicación: Barcelona: Tusquets, 2009
Descripción física: 304 p., 22 cm.
ISBN: 84-226-7840-3
Serie: Colección Andanzas, 431 / Serie Wallander
CDU: 821.113.6-31"19"
Signatura: N MAN ase
Precio: 7,95 euros en la Casa del Libro


OS PRESENTO AL COMISARIO WALLANDER

Esta es, cronológicamente, la primera novela que tiene como protagonista al comisario de policía Kurt Wallander ya maduro (porque hay una, titulada La pirámide, que es la novena de la serie, pero recoge sus primeros casos como policía novatillo). Leyendo cosas por ahí me enteré de que en España no se habían publicado por orden las novelas de la llamada "Serie Wallander"; supongo que por eso fue por lo que la mayoría de la gente leyó en primer lugar La quinta mujer, igual que me pasó a mí.

En cuanto al autor, a modo de resumen, sólo decir que Henning Mankell nació en Estocolmo en 1948, y ha escrito narrativa de lo más variado, desde obras de teatro, novelas infantiles y juveniles, artículos y hasta novela negra que, precisamente gracias a su personaje del inspector Wallander, es el género que le ha hecho más conocido. De hecho, esta novela en concreto hizo que la Academia Sueca de Novela Negra galardonara a Mankell con su premio llamado "Llave de cristal" a la mejor novela policiaca.

El argumento y los personajes


La historia comienza cuando el inspector Wallander, de la comisaría de la ciudad de Ystad, se pone al frente de una investigación bastante complicada: el asesinato de un matrimonio de ancianos, Johannes y Maria Lövgren), en una granja de Lenarp, a las afueras de la ciudad. Lo más inquietante es que el marido ha sido torturado salvajemente, y la mujer consigue sobrevivir a duras penas. Sin embargo, el caso se complica cuando unos días después, ya en el hospital, muere, no sin antes pronunciar una sola palabra: extranjero. Esto, unido a la ola de inmigración que está teniendo lugar en los últimos tiempos en Suecia, hace que surjan algunos grupos xenófobos que no dudan en culpar a los extranjeros de todas las cosas que están pasando en el país de un tiempo a esta parte.

El protagonista de la novela, cómo no, es el comisario de policía Kurt Wallander, que a pesar de que en algunos momentos tiene dudas de si ha elegido bien, en realidad sabe con certeza que nunca podría dedicarse a otra cosa en la vida más que a ser policía. Sabemos que nuestro protagonista acaba de separarse de su mujer, Mona, con la que tiene una hija llamada Linda (en plena adolescencia, sin saber aún qué va a hacer con su vida, y que choca constantemente con Wallander); que no termina de asimilar su reciente separación; y que, para remate, ni siquiera consigue llevarse bien con su padre, que está empezando a sufrir los achaques propios de la edad y, entre otras cosas, lleva toda la vida echándole en cara a nuestro comisario que un día decidiera hacerse policía, y se pasa la mayor parte del tiempo pintando siempre el mismo cuadro: un paisaje, a veces con un urogallo y a veces sin él. Debido al deterioro de su padre, Wallander se ve "obligado" (ya que no se llevan demasiado bien) a tratar de vez en cuando con su hermana Kristina, a la que ve muy poco porque vive en Estocolmo.

De hecho, Wallander se vuelca en su trabajo (en el que día a día demuestra ser todo un experto) porque los demás aspectos de su vida son un desastre absoluto: además de todo lo anterior, como él mismo dice, su vida sexual es inexistente, no se cuida demasiado y está empezando a ganar bastante peso, y de vez en cuando le da demasiado a la bebida. A lo largo de la novela iremos conociendo a otros personajes, en su mayoría colegas de Wallander, que en algunos casos nos acompañarán en el resto de la saga:

- los policías Peters y Norén, que hacen una breve aparición;
- Rydberg, un veterano que es quien le ha enseñado a Wallander todo lo que sabe;
- Martinsson, el más novato y último en llegar;
- Svedberg, un tipo muy peculiar que tiene unas rarezas que a veces hasta te hacen gracia;
- Ebba, la simpática secretaria de la comisaría, que es casi como si fuera una madre;
- Sten Widén, un viejo amigo de Wallander que hace años soñaba con ser cantante de ópera;
- Hanson, otro policía de los más veteranos, y casi siempre la mano derecha de Wallander;
- los fiscales Per Akeson y Anette Brolin...

Además de ir presentándonos a todos, junto con los detalles propios de la investigación policial, a lo largo de la novela iremos conociendo a cada uno de estos personajes; en algunos Mankell profundiza más, y de otros sin embargo tan sólo nos da unas breves pinceladas. Pero el denominador común a todos ellos es que son totalmente creíbles.

También resulta totalmente creíble el día a día del trabajo dentro de las dependencias policiales; no sé si realmente la policía sueca seguirá los métodos que nos narra Mankell, y supongo que se habrá permitido alguna licencia, pero la forma de trabajar de los policías resulta perfectamente lógica. Además de recrearse en la descripción de los hechos, de los pasos que la policía va siguiendo en la investigación, o incluso de los diferentes momentos en los que se desesperan porque tienen la sensación de que se han quedado estancados en algún punto y no consiguen avanzar, el autor hace un retrato bastante detallado de la sociedad sueca (supongo que en cierto modo esto será también una especie de crítica).

En este caso concreto, Mankell se sirve de la investigación de estos asesinatos (aparentemente cometidos por extranjeros) para sacar a la luz los perjuicios que los suecos tienen hacia los inmigrantes, relatando entre otras cosas la oleada de ataques a varios extranjeros residentes en Ystad, que tienen lugar tras conocerse el asesinato de los dos ancianos. Por supuesto, no digo que esta forma de pensar incluya a todos los suecos, pero al leer la novela puede que hasta se te caiga del todo esa idealización que la mayoría solemos tener de ellos; porque imagino que casi todo el mundo, al pensar en suecos, los ve como personas civilizadas, de mente muy abierta, y con un país que se nos antoja como algo idílico. A lo largo de la lectura de la novela iremos descubriendo "el lado oscuro" de los suecos.

Conclusión


Como el resto de novelas de Mankell que he leído hasta ahora, también ésta me ha resultado de lo más amena; no es la que más me ha gustado de las nueve, pero igualmente le pongo cinco estrellas porque a algunas de las otras les habría puesto seis si hubiera sido posible. Es de las típicas novelas que te tiene en vilo prácticamente todo el tiempo (a veces el ritmo es más lento, pero casi todo el rato vas descubriendo cosas junto con la policía, e incluso tienes momentos en los que llegas a sufrir por lo que les pasará a los personajes). La primera vez que leí a Mankell era un poco reticente porque no tenía ni idea de si la novela que me prestaron sería el típico best-seller, pero enseguida me di cuenta de que no tenía nada que ver. Supongo que es la mezcla de novela policíaca con algo más: el autor no se limita a exponernos el caso y las pesquisas que lleva a cabo la policía para dar con la solución, sino que nos va introduciendo en la vida de cada uno de los personajes, cada uno con sus manías, sus rarezas, su situación personal... Como decía antes, todos ellos son completamente creíbles y creo que ese es uno de los trucos de Mankell para que sus novelas tengan tanto éxito. De hecho, después de una o dos novelas, el inspector Wallander es tan cercano que es casi como si fuera un miembro más de la familia.

Si no os gustan demasiado las novelas policíacas, me atrevería a decir que puede que Wallander os cautive. Y si, por el contrario, sois amantes de este género, sin duda Mankell os atrapará. Y si además sois como yo, maniáticos de leer las sagas por orden, Asesinos sin rostro es la mejor manera de empezar a conocer a este comisario tan majete.